Nutrición saludable
En tu cuaderno de ciencias escribe la información que se encuentra resaltada.
Aprendizaje Esperado: Explica cómo evitar el sobre peso y la obesidad con base en las características de una dieta correcta y la necesidad energética en la adolescencia.
¿Sabías que
nutrición, no es precisamente lo mismo que alimentación?
La nutrición
se refiere a los nutrientes que componen los alimentos, implica los procesos
que suceden en tu cuerpo después de comer, es decir la obtención, asimilación y
digestión de los nutrimientos por el organismo.
Mientras que
la alimentación es la elección, preparación y consumo de alimentos, lo cual
tiene mucha relación con el entorno, las tradiciones, la economía y el lugar en
donde vives.
La
alimentación saludable cumple con necesidades nutricionales que necesita el
cuerpo, para mantener una buena salud. Además, comer sano te protege de sufrir
enfermedades como obesidad, azúcar en la sangre y presión alta.
Por el
contrario, un alimento "no saludable" aporta poco valor nutricional y
tiene muchas calorías pues usualmente son ricos en grasas y azúcares.
Comer
sanamente significa hacerlo en porciones equilibradas, tomando de los 3 grupos
de alimentos, que son: los carbohidratos (azucares), grasas y proteínas
(leguminosas, carnes y lácteos).
Procura que
tu alimentación sea:
- Completa: incluye productos de
todos los 3 grupos de alimentos, al combinarlos te aportarán los
nutrientes necesarios.
- Equilibrada: toma cantidades
apropiadas de alimentos, pero sin excesos.
- Suficiente: intenta que cubra las
necesidades del organismo para asegurar sus funciones vitales y permita
mantener un peso corporal adecuado.
- Variada: la combinación de
diferentes alimentos te proporcionará los aportes de vitaminas y minerales
que tu organismo necesita.
- Adecuada para cada
individuo: adapta
tu dieta a tus necesidades (edad, sexo, actividad, historia clínica,
constitución corporal, hábitos alimentarios, época del año y gusto).
Verde: Verduras y frutas. Por ejemplo: acelgas, verdolagas, espinacas, brócoli, chayote, jitomate, hongos, zanahoria, pepino, lechuga; frutas como guayaba, melón, mandarina, plátano, manzana, papaya, uvas; entre otros.
Amarillo: Cereales y tubérculos. Como: maíz, trigo,
avena, cebada, amaranto, arroz, tortillas, pan integral, pastas; tubérculos
como papa, camote, yuca, etc.
Rojo: Leguminosas y alimentos de origen animal:
frijol, haba, lenteja, alubia, soya texturizada; alimentos de origen animal
como leche, queso, huevo, pescado, mariscos, pollo, carnes embutidos, etc.
- Frutas y verduras: en fruta equivale al
puño de tu mano, es decir, 2 o 3 frutas al día; así como de 3 a 5
porciones de verdura (una porción de verdura cruda es una taza y si está
cocida es ½ taza).
- Cereales: Para el arroz, cereal
y pastas, una porción corresponde a ½ taza medidora; para alimentos como
pan de caja o tortilla es una pieza; y ½ pieza para papa, bolillo o telera
(pero sin el migajón). La porción para galletas simples como las marías,
habaneras o palitos de pan, es de 5 piezas. Recuerda que en el desayuno y
en la cena, no debes comer más de dos porciones por día mientras que para
la comida, son sólo cuatro porciones.
- Alimentos de origen animal: Una porción equivale a
la palma de tu mano en filetes de pescado, pechugas de pollo aplanadas o
bistecs. Si se trata de pieza de pollo, es una pieza chica, pero sin piel.
Para las carnes frías, se entiende por porción dos rebanadas delgadas de
jamón o pechuga de pavo. Para el huevo la porción es una pieza o dos
claras. Para la leche y el yogur una porción es igual a una taza.
- Leguminosas: Una porción de
leguminosas es ½ taza de frijoles, garbanzos, lentejas, habas, entre
otros. En cada ocasión, no debes consumir más de una taza de un tipo de
leguminosas.
- Grasas: Las grasas
recomendadas son las oleaginosas (semillas o frutos de vegetales) como
son: nueces, pistaches, almendras, cacahuates o avellanas; inclúyelas como
complemento para tus alimentos sin pasarte de un puño. Recuerda evitar al
máximo las grasas animales como crema, manteca o mantequilla. Los aceites
úsalos en pequeñas porciones para preparar o aderezar tus alimentos.
Tips
- Para comer entre comidas
escoge verduras, puedes agregarles limón o chile piquín
- No dejes pasar muchas horas
entre un alimento y otro, pues tendrás más hambre y podrías consumir más
de lo debido
Una buena
nutrición depende de una alimentación balanceada.
La alimentación resulta esencial para
disfrutar de un adecuado estado de salud. Pese a ello, no siempre estamos
informados sobre esto. Para que aprendas a conocer un poco más este mundo a
continuación te mostramos cuáles son las principales enfermedades nutricionales.
Obesidad y
sobrepeso: Supone todo
lo contrario a la desnutrición. Se trata del consumo excesivo de comida, que se
acaba transformando en la acumulación de grasa corporal que puede llegar a
originar desequilibrios psicológicos y hormonales, entre otras cosas.
También incrementa las posibilidades de padecer cáncer o diabetes de tipo
2.
Desnutrición:
Se produce
esta situación cuando consumimos muy poca comida, hay problemas de
digestión o nos alimentamos de forma inadecuada. En realidad, la
ingesta de calorías resulta inferior a lo que precisa el organismo para
funcionar correctamente.
Bulimia: La depresión y el comportamiento
social son alguno de sus síntomas más significativos. La bulimia se trata de un desorden
alimenticio provocado por una obsesión por el peso corporal, el
aspecto físico y la ansiedad. Acarrea un consumo elevado de alimentos, casi
sin control, para a continuación vomitar o utilizar laxantes con dietas muy
estrictas.
Diabetes: Se vincula con la obesidad.
Consiste en la incapacidad del cuerpo para producir la suficiente
insulina. Esto provoca en una mala absorción de glucosa y su abundante
presencia en el flujo sanguíneo.
Anemia: La anemia es una enfermedad que
supone una caída importante en el número de glóbulos rojos. Se debe
sobre todo a una mala absorción de minerales, sobre todo el hierro. Para que no
le falte hierro a tu organismo deberías incluir con más frecuencia alimentos
como el atún, carne de vacuno o el huevo.
Anorexia: La anorexia es un trastorno de la
alimentación. La anorexia implica el
miedo a ganar peso. Guarda muchas similitudes con la bulimia. Acarrea
pérdidas de peso muy pronunciadas debido a la práctica abusiva de
deporte y a las dietas tan restrictivas.
Es importante que conozcas al detalle las
características de estas enfermedades nutricionales para no ser víctimas de
ellas
La caloría es una medida de energía. Los alimentos tienen
calorías, es decir, los alimentos suplen al organismo con energía, que se
libera cuando los alimentos se descomponen en la digestión. La energía permite
a las células realizar todas sus funciones, incluida la síntesis de proteínas y
otras sustancias necesarias en el organismo. La energía puede ser utilizada
inmediatamente o almacenada para su uso posterior.
Cuando el consumo de calorías es insuficiente para las necesidades
del organismo, este comienza a utilizar los hidratos de carbono que se hallan
almacenados en el hígado y en los músculos. Dado que el organismo moviliza con
prontitud los hidratos de carbono almacenados, y que durante esta acción
excreta agua, la pérdida de peso tiende a ser inicialmente rápida. Sin embargo,
la poca cantidad de hidratos de carbono almacenados solo proporciona energía
por un corto periodo de tiempo. Después, el organismo recurre a los depósitos
grasos. Dado que la grasa contiene mayor cantidad de energía por unidad de
masa, la pérdida de peso es más lenta a medida que el organismo la utiliza para
obtener energía. Sin embargo, la cantidad de grasa almacenada es bastante grande
y puede, en la mayoría de las personas, suministrar energía durante mucho
tiempo.
¿Cómo se miden las calorías de los alimentos?
Las etiquetas indican el número de
kilocalorías (kcal) por ración, pero, ¿cómo se determina este número? La
respuesta es muy simple: quemando el alimento. Una muestra del alimento se
coloca en una cámara aislada, llena de oxígeno y rodeada de agua, denominada
bomba calorimétrica. La muestra se quema completamente. El calor de la
combustión hace aumentar la temperatura del agua, que se mide; este valor
indica el número de calorías del alimento. Por ejemplo, si la temperatura
del agua aumenta en 20 grados, la comida contiene 20 calorías. El método de
medición de las calorías se denomina calorimetría directa. |
Cantidad de calorías recomendada
Las necesidades energéticas varían notablemente, desde cerca de
1000 hasta más de 3200 kcal al día, dependiendo de la edad, el sexo, el peso,
la actividad física, las enfermedades o trastornos actuales y la velocidad con
la que la persona quema calorías (tasa o índice metabólico). Las personas que
participan en actividades fuera de las actividades normales de la vida diaria
que precisan energía adicional requieren la ingesta calórica del rango
superior. Sin embargo, normalmente, las calorías diarias necesarias para
mantener el peso corporal están en torno a los siguientes valores
- Para
los niños pequeños: 1000 a 1800
- Para
los niños mayores y los adolescentes: 1200 a 3200
- Para
los adultos: 1600 a 3000
El número de calorías necesarias aumenta a medida que aumenta el
nivel de actividad y, en general, los niños varones y los hombres necesitan más
calorías que las niñas y las mujeres.